martes, 25 de diciembre de 2012

¿Por qué los Natzratim No Creen en Jesús?




PREGUNTA: No entiendo a los Natzratim, ¿ustedes creen en jesús o no? Porque veo que citan sus palabras, pero luego dicen algo totalmente diferente a lo que yo he escuchado sobre las enseñanzas de jesús.

RESPUESTA A CARGO DEL MORÉ AVDIEL BEN OVED: Bien, para no causar confusión, partiremos desde este punto: jesús NO ES LO MISMO que Iehoshúa de Natzrat, y lo vamos a explicar.

Existe un principio en este mundo que es el siguiente: "Las acciones son las que testifican de una persona. No podemos hablar positiva o negativamente de una persona, si esa persona no hizo algo". O sea, que es en dependencia a lo que hacemos que somos conocidos. Como dijo Rabí Iehoshúa:

"Por sus frutos los conocerán"


Ahora, apliquemos este principio a jesús y a Rabí Iehoshúa de Natzrat.

Sobre Iehoshúa de Natzrat, son sus primeros alumnos los que nos comunican, de acuerdo a lo que él hizo, quien es Iehoshúa: Es un ser humano, un judío ejemplar, un Rabino que enseñó Torah a judíos para cumplir con su legado de ser una luz a las demás naciones, un Tzadiq muy elevado espiritualmente, proclamado Rey en Israel, y que entregó su vida por esos ideales tan puros, como son la Torah y sus compatriotas el pueblo de Israel.

¿Quién es entonces jesús? El personaje jesús surgió dentro de una religión romana. Es el dios que luego de entregar la Torah a Israel, viene a la tierra en forma humana con enseñanzas nuevas que contradicen a la Torah, y a buscar un nuevo pueblo.

Por lo tanto, los Natzratim, como hijos de Israel y como personas que viven de acuerdo a la Torah, NO PODEMOS CREER EN LA DEIDAD CRISTIANA.

Jesús es un personaje mitológico que solo existe en las mentes de los religiosos. No pudo ni siquiera haber nacido en el Israel del primer siglo tal divinidad con manto rojo romano, afeminado, que enseñó el odio al pueblo de Israel. Jesús no tiene nada que ver con Iehoshúa de Natzrat.

O sea, no es cuestión de nombres, como quizás hace el movimiento mesiánico que perpetúa las doctrinas cristianas y que le cambia el nombre a la deidad jesús a Yeshúa, Yahoshúa, o cualquier clase de nombres. No, no se trata de nombres, sino de hechos. Como dijimos al principio: "Las acciones que representa esa persona, lo que enseñó".

Las enseñanzas de Iehoshúa de Natzrat NO SON las enseñanzas presentadas por el cristianismo dadas por jesús. Jesús es lo opuesto a Iehoshúa de Natzrat: uno es semi-dios, y el otro es un Rabino brillante; uno contradice a la Torah, y el otro la sustenta trayendo luz con su explicación; uno salva a las personas para llevarlas al cielo, y el otro restaura a Israel para que sean una guía ejemplar y exista un mundo mejor aquí en la tierra.

Pero este principio de antítesis no solo lo podemos aplicar a jesús y a Rabí Iehoshúa, sino también a Shaúl y a pablo: dos personajes totalmente distintos; y también a Shim'ón Kefa y a pedro, imagínese: uno es el primer papa de la iglesia católica que persiguió y mató judíos, y el otro es el líder galileo que dirigió el movimiento para la restauración de Israel.

Por otra parte, ¿quién no ha escuchado esa frase de "el dios de Israel es el mismo dios de todos"? Perdón si ofendo a alguien, pero El Eterno quien eligió a Israel como su pueblo, no es el viejito barbón que está sentado en el cielo en un trono. HaShem no tiene nada que ver con el concepto de "dios" de las religiones. En ese contexto, podemos decir que nosotros los Natzratim NO creemos en "dios", como ningún judío cree en "dios".


En conclusión, nosotros los Natzratim no podemos creer en jesús, porque creerle sería ir en contra de Rabí Iehoshúa de Natzrat, y más importante, sería ir en contra de la Torah.




FUENTE: www.natzratim.com

lunes, 24 de diciembre de 2012

Los Natzratim No Son Mesiánicos


PREGUNTA: ¿Los Natzratim son acaso judíos mesiánicos?

RESPUESTA A CARGO DEL MORÉ AVDIEL BEN OVED: Los Natzratim actuales, así como los antepasados Natzratim, y me refiero a todos los Talmidim Rishonim shel Rabenu Iehoshúa miNatzrat, no son Mesiánicos, ni Cristianos. Nuestra postura es la misma que cualquier judío Shomer Torá u'Mitzvot (observante de la Torá y los mandamientos).

No creemos en un Mesías que sea semi-dios o divino, sino en un Tzadiq, un Justo, un líder de nuestro pueblo, descendiente de David HaMelej, un ser humano espiritualmente más elevado que cualquiera de nosotros predestinado con el potencial de ser Mashíaj y todo lo que eso significa.

Para los Natzratim, la Torá y las Mitzvot siguen en efecto hasta el día de hoy, como dijo Rabenu:

אל תחשבו שבאתי להפר התורה אלא להשלים 
"Al tajashvu shevati lehafer HaTorá ela lehashlim"
(No piensen que vine a dejar sin efecto la Torá, sino explicarla adecuadamente)

Los Escritos de los Primeros Alumnos de Rabí Iehoshúa NO son para nosotros un Brit Jadashá, NO son un nuevo pacto o un pacto renovado; sino que son las enseñanzas del Rabí de Natzrat y la de sus alumnos transmitidas por escrito. No son nada más que eso.

El hecho del término Meshijiyim (Mesianistas), o inclusive el término Iahadut Meshijí (Judaismo Mesiánico), NO tiene sentido, pues el Iahadut en sus raices es Meshijí o Mesianista. Decir que existe un Judaísmo Mesianista y uno No Mesianista es absurdo. Uno de los 13 principios del Iahadut dice:

"Yo estoy seguro con toda emunáh (firmeza) en la venida del Mashiaj".

Y por otro lado, en el Movimiento Natzratim nuestra creencia en un Mashíaj Ben David está tan viva como la de cualquier otro Hijo de Israel. Nuestros principios están en un Mashíaj que hace volver a Israel a la Torá, no que lo aleja de ella. En un Mashíaj que nos ayuda a cumplir con ese legado de ser Or laGoim (una luz a las naciones), ser una nación modelo.

No creemos en un Mesías como de que él mismo salva, ni que pueda otorgar vida después de la muerte, o que él mismo pueda expiar por otros humanos. ¡NO! Ninguno de esos conceptos Cristianos o Mesiánicos tiene base en las enseñanzas de Rabí Iehoshúa de Natzrat y la de sus primeros alumnos. El Mashíaj es Sulam Iaaqov (la escalera de Iaaqov), es el medio que nos permite acercarnos a HaShem, de regresar a la Torá. Él mismo NO salva a nadie, sino que a través de sus enseñanzas y de su misión de elevar a Israel, es que Israel logra adherirse al Eterno para entonces adquirir Kaparat Avonot (expiación de las iniquidades) SÓLO para aquel que hace T'shuvá (retorno), para aquel que reniega de sus pecados y vuelve al Eterno de todo corazón.

Sólo recibimos Kaparat Avonot de HaShem, de nadie más, sólo de Él (El Eterno), y es gracias al Mashíaj, por eso decimos: Zejutó Yaguen Alenu ve'al Kol Israel (que sus méritos sean sobre nosotros y sobre todo Israel). Porque él es el puente que nos conecta, que conecta a los hijos con El Padre. El hombre NO puede otorgar Kaparat Avonot, sólo HaShem.

Ese es nuestro Mashíaj, y nosotros como sus alumnos seguimos su ejemplo, nos transformamos en un medio o un puente para acercar a los descarriados de Israel a la Torá.

Esta es una invitación a todos los Judíos Mesiánicos que han abandonado el Cristianismo: Verdaderamente retornen a los caminos de la Torá, al Mashíaj Amití (verdadero Mashíaj), al Mashíaj de Israel. No al centro de adoración, sino al Tzadiq que dio su vida para que Israel se adhiriera al Todopoderoso, HaShem Itbaraj, con un corazón sincero para obedecer Torá u'Mitzvot.



FUENTE: www.natzratim.com

miércoles, 19 de diciembre de 2012

Comentario sobre Rabí Iehoshúa y su 'Fariseísmo'

por Avdiel Ben Oved


En sentido general, las conclusiones a las que llegó Mario Saban sobre Iehoshua no son nuevas. Ya Yoseph Klausner había concluído en lo mismo años anteriores.

Ahora, concluir en que Iehoshua era Fariseo es ilógico por varios motivos, por ejemplo: si Iehoshua fuese fariseo, también lo fueran todos sus discípulos. Las discusiones de Iehoshua con los Fariseos no fue por los mismos detalles legales que discutían la escuela de Hilel y Shamai, sino que fueron discusiones de principios de observancia. Si Iehoshua hubiese sido Fariseo, hubiese sido medio de orgullo para Shaul el Fariseo; en su lugar, encontramos que Shaul dice que el Fariseísmo no tiene comparación con lo que adquirió por medio de Iehoshua. Esto no significa que el Fariseísmo sea negativo, al contrario, fue un estilo de vida muy elevado del cual Iehoshua dijo que sus discípulos debían sobrepasar.

No hay que olvidar que en aquellos tiempos, como en los nuestros, la mayoría de los judíos no formaban parte de ningún movimiento en particular, era la minoría de los judíos quiénes se afiliaban a los movimientos, tal como sucede hoy. Por lo tanto, las similitudes entre los Fariseos y Iehoshua son naturales pues les unía a ambos la Torá.

Para comprenderlo de mejor manera, hay que tener presente que Iehoshua no tiene como objetivo fundar una nueva escuela, sino unificar a todo Israel. Por esta razón, vemos que tanto Fariseos como no-Fariseos lo siguen. La meta de Iehoshua es más que ser un Rabino con una escuela, él también es el Mashiaj, y en este sentido es el Rabino mayor de todos, pues él es el camino para vivir la Torá plenamente. Los profetas habian dicho que llegaría el momento en que Israel viviría la Torá por naturaleza propia; esto sería cuando Ruaj Ha'Qodesh sea internalizado en los hijos de Israel, esta realidad toma lugar gracias al Rabino Iehoshua el Mashiaj, por esta razón cualquier judío observante encontraría en el Mashiaj su esperanza de vivir justamente la Torá, sin dejar de ser Fariseo o de cualquier otra escuela.




(Extraído del grupo Ha'Derej Natzratim en Facebook)