Tejiat haMetim
תחית המתים
(Dar vida a la muerte)
Uri Coreas
Cuando usualmente las personas hablan con respecto a lo que conocen como resurrección, lo hacen pensando que dicho "término" está ligado a las religiones occidentales, sin darse por enterados que dicho término (claro en su concepto hebreo) es de raíces hebreas; es decir, que estas personas, cuando hablan de la resurrección de los muertos, la perciben de acuerdo a como estas religiones lo han mostrado y piensan que la tradición hebrea nada tiene que ver con dichas ideas; ahora bien, esto no es en su totalidad verdadero, ya que, como dijimos, la raíz de este principio es hebreo, lo que difiere es el concepto de este; decimos que es un principio hebreo porque así lo plasmo Rabi Moshe ben Maimon, conocido como el RaMBa"M, en un momento donde Israel veía amenazado su legado, él estableció lo que comúnmente se conoce como los Trece Principios de Fe, y el último de estos cita así:
אני מאמין באמונה שלמה שתהיה תחית המתים
Yo estoy seguro con firmeza completa, que tendrá lugar la Resurrección de los Muertos…
En la tradición de Israel dicho concepto e idea es aceptada de manera universal, tal como lo manifiesta el RaMBa"M en su obra Maamar al Tejiat haMetim:
El concepto de la Resurrección de los Muertos universalmente aceptado por nuestro pueblo, incorporado en nuestras plegarias diarias… (Maamar al Tejiat haMetim)
Pero este no es la base de esta idea en la tradición de Israel, pues la Torá misma nos deja ver de manera metafórica e interpretativa esta realidad:
Y Yo me revele a Abraham, a Itzjaq y a Iaaqov como El Shadday, pero con mi nombre, Eterno, no me di a conocer a ellos.
Y Yo también establecí Mi Pacto con ellos, para entregarles la Tierra de Canaán, la Tierra donde habitaron (Shemot 6:3-4)
Rabi Simai dijo: "¿En qué lugar de la Torá se menciona la Resurrección de los Muertos? En el versículo: "Y Yo también establecí Mi Pacto con [los avot], entregándoles la Tierra de Canaán" [Shemot/Éxodo 6:4]. El versículo no dice "entregándoles a ustedes" sino que dice "entregándoles a ellos". De aquí [aprendemos] que la Resurrección de los Muertos es de la Torá".
Y así podríamos citar muchos más textos, tanto del TaNa'J como de la Masoret; sin embargo, podemos notar en estos ya mencionados como está intrínsecamente adherido el principio de Tejiat haMetim en la tradición de Israel.
Ahora bien hablaremos un poco sobre el Tejiat haMetim de manera profunda.
En B'reshit, la Torá nos muestra el Midrash de Adam, Java y el Najash, en el transcurso del relato, HaQadosh Baruj Hu ordena a Adam que no "coma" del fruto del árbol de conocimiento del bien y del mal, y que si "consumían" el fruto "muerto morirá" (heb. Mot Tamut מות תמות). Es interesante notar que pareciese que el texto nos hablara de dos muertes al decir "muerto – morirás" y se torna más interesante al continuar el relato que Adam "consume" el fruto del árbol y no muere inmediatamente, esto hablando de manera "física", según el relato nos muestra; sin embargo, el texto nos dice que HaQadosh Baruj Hu lo vistió de túnicas de pieles.
Tomaremos este pequeño relato para poder hablar sobre Tejiat haMetim.
La Torá, como ya sabemos, inicia con la palabra B'reshit; con referencia a eso los sabios comentaron:
למה נברא העולם בב להודיעך שהן שני עולמים העוה''ז והעוה''ב
¿Por qué el mundo fue creado con la letra “bet”? Para enseñarnos que hay dos mundos
– este mundo y el Mundo Venidero. (B'reshit Rabá 1:10)
Por lógica, si existen dos mundos: el Olam Hazé (mundo presente) y Olam Habá (mundo venidero). Nosotros, como seremos humanos, tenemos dos posibilidades tanto para disfrutar el Olam Habá y vivir el Olam Hazé; esto se puede denominar de manera rápida como Neshamá y Nefesh, en otras palabras más comprensibles, seria el cuerpo/piel para vivir la Era Presente, y la Luz/Alma que el creador insufló.
Por lo tanto, hablar de dos muertes toma sentido comprendiendo lo antes mencionado; es decir, que HaQadosh Baruj Hu, dice a Adam: "Muerto 'morirá tu alma' y al morir tu alma por consecuencia morirá tu 'cuerpo'; esto como resultado de 'comer' del fruto del conocimiento del bien y del mal"; tomándolo en un nivel metafórico, tal como lo explica el Maharal, el árbol representa la fuente, mientras que el fruto es el producto. Arrancar la fruta del árbol fue un acto de separación entre el mundo físico y su raíz espiritual.
Dos Muertes
Después de esa acción, la Neshamá/Alma/Luz tuvo una separación, un alejamiento de su raíz que es HaQadosh Baruj Hu. Esa separación "primera muerte/mot" generó la "segunda muerte/tamut".
Por lo tanto, al evitar la "primera muerte" logramos colocar un sentido a la "segunda muerte"; es decir, no es que se "evita" la segunda muerte/física, sino que toma un objetivo, y es que, al haber sucedido la separación del mundo físico de su raíz espiritual (arrancar la fruta del árbol), el camino a la perfección se vio alterada; por lo tanto, la "muerte segunda/tamut – física" se vuelve necesaria para que la Neshamá/Alma/Luz retorne a su raíz espiritual y no exista más la separación, y la Neshamá/Alma/Luz tenga la fuerza para poder purificar el cuerpo de manera completa, en lo que denominamos Tejiat haMetim.
Ahora, el texto que tomamos como base muestra que, después del suceso del fruto del árbol, HaQadosh Baruj Hu hizo túnicas de pieles.
El que se mantiene firme en mi enseñanza, aunque este muerto vivirá. – Iehoshua miNatzrat
La Palabra hebrea que utiliza para piel es עור – Or, existe otra palabra hebrea que se lee también como Or - אור pero que significa luz.
La sabiduría interna de la Torá nos enseña que Adam estaba recubierto de Or – אור , hasta que se experimentó la separación del "fruto"; luego de ese suceso perdió su cuerpo con Or - אור – luz, y quedó con un cuerpo de Or - עור, o sea de piel.
Que Adam estuviese recubierto de piel le hace un ser que sucumbe a sus deseos, a su parte instintiva, y eso hará que su vida sea sin sentido, y como resultado su muerte no tendrá ningún propósito ni objetivo, ya que no se conectó con su raíz espiritual, experimentó la primera muerte (interna); sin embargo, si logramos revestirnos de luz, nos conectamos con nuestra raíz espiritual y vivimos una vida con sentido, así evitamos la muerte interna; por lo tanto, la muerte segunda tendrá sentido y es donde alcanza Tejiat haMetim.
En Igueret el Qehila baEfesos capitulo 5, Shaul expresa de manera más clara al instruir caminar como Bené Or (hijos de luz).
Comprendiendo esto, podemos adentrar más a las palabras de Rabenu Iehoshua al decir:
El que se mantiene firme en mi enseñanza (vive internamente), aunque este muerto (segunda muerte/física - Tamut) vivirá. (Edut haTalmid haAhuv).
Así que, muestra de estar revestidos de luz es estar unidos, ser Ejad (uno) con HaQadosh Baruj Hu, y actuar con Ahavá (amor); no casualmente cada una de estas palabras suman 13 y 13; y la suma de Tejiat haMetim es de 1313.
Hatzlaja!
FUENTE: www.beneyisrael.com